En el extenso norte de México, donde los paisajes van desde el desierto costero hasta la imponente sierra, existe una enorme riqueza cultural protagonizada por los pueblos indígenas. Sin embargo, las culturas del norte tienen una historia y costumbres distintas a las del centro y sur del país. Herederos de una tradición seminómada y guerrera, los pueblos indígenas del norte participan hoy de la vida moderna, enfrentando condiciones adversas para perpetuar su legado y sabiduría ancestral. El arraigo a la identidad, la cosmovisión, la lengua, la danza, la música y las artes plásticas demuestran la fuerza de las culturas. Esa fuerza constituye la verdadera riqueza de los mexicanos. Sin embargo, en la actualidad casi todos los pueblos del norte afrontan el riesgo de pérdida de sus idiomas y culturas, lo que significa un daño para todos como seres humanos, sólo reversible si todos conocemos y valoramos este Norte infinito.