En el otoño de 1907 visitó México el Honorable Elihu Root, secretario de Estado de los Estados Unidos y jefe del Gabinete del presidente Theodore Roosvelt. Lo acompañaban su esposa e hija. En su valija vendría el doble propósito de conocer nuestro país y estrechar los lazos de amistad y recíproco apoyo entre las dos Repúblicas.

En la estación del Ferrocarril Nacional Mexicano de la Ciudad de México lo esperaba una multitud con banderas y arcos de flores. Oficialmente lo recibieron Ignacio Mariscal, secretario de Relaciones, José Yves Limantour, secretario de Hacienda, Enrique C. Creel, Embajador de México en los Estados Unidos, Guillermo de Landa y Escandón, Gobernador del Distrito Federal, Fernando Pimentel y Fagoaga, presidente del Ayuntamiento, entre otras autoridades, así como la colonia americana que estuvo representada por el secretario de la Embajada de los Estados Unidos, David E. Thompson. El presidente Porfirio Díaz lo esperó en el Palacio Nacional.

RETRATAR A MÉXICO

El señor Root y su familia fueron hospedados en el Alcázar de Chapultepec. Durante los 16 días que permaneció en nuestro país se le ofrecieron varios banquetes, entre ellos una Garden Party en Chapultepec. Su agenda fue enorme: visitó la Cámara de Diputados, la Basílica de Guadalupe, el Colegio de la Paz (Las Vizcaínas), la Penitenciaría de Lecumberri, las obras del Teatro Nacional, el edificio de Correos, la Escuela Nacional de Ingenieros (Palacio de Minería), la Catedral, el Museo Nacional, el Jockey Club (Casa de los Azulejos); el Instituto Geológico Nacional; el Country Club; Xochimilco; Cuernavaca, donde visitó el Palacio de Cortés y el Jardín Borda; Teotihuacán, la ciudad de Puebla, la pirámide de Cholula y Orizaba. De todo lo que vio dejó constancia: tomó las notas que se convertirían en un libro (publicado en 1908) y más de doscientas fotografías del México y los mexicanos al filo del agua: dos años después estallaría la Revolución.

Regresó a la capital sólo para despedirse del presidente Díaz a quien expresó: “Regreso a mi país con la confianza y la seguridad de que la prosperidad de México no es pasajera y fugaz, sino permanente y duradera”. Rumbo a los estados Unidos visitó Guadalajara, Aguascalientes; San Luis Potosí y, por último, Monterrey.

AL FILO DEL AGUA

Ya en la frontera, se despidió de los comisionados mexicanos: teniente coronel Pablo Escandón, Pedro Rincón Gallardo, Samuel García Cuéllar y el coronel Porfirio Díaz, que le acompañaron durante todo su recorrido, tanto de venida como de regreso a su país…A todos ellos, no podían imaginarlo, les sorprendió el movimiento popular revolucionario.

El señor Root vio y fotografió los últimos momentos del viejo régimen. Sus imágenes, resguardadas en el Museo Nacional de Historia, aquí en el Castillo de Chapultepec, son testimonios de la semilla del siglo XX mexicano.